Es la ventaja
Momentos estelares de los cercanos nos obligan a intentar movernos un poco.
No babeemos más, si bien el vendedor de baberos necesita del elixir argento, ja.
Bella obligación: no titubees!
Esa es la ventaja de apreciar con una esmerada detención el brillo enorme de algunos amigos.
Nos entregan carcajadas y boato.
Aunque antes no teníamos tiempo o aunque en el futuro estemos copados de actividades, siempre mentir y decirse que sí lo tenemos.
Nunca decir que nos falta el tiempo, nunca vivir así, al son de esas frases; mentir y crear otra cosa a ese respecto.
lunes, 7 de junio de 2010
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2 comentarios:
yo (casi) siempre titubeo...
un 'amigo' hoy me dijo: tienes un serio problema de inseguridad.... y bueno... en cierta medida tiene razón...
pero es que yo creo que son pocos los que logran que me entregue completamente con sus carcajadas....
aprenderé a tejer botitas para hacerle la competencia al señor de los baberos.... no garantizo perfección de todos modos... já
un abrazo amigoooooo!!!!!!!!!
Compañía de vermouth y noche, ja:
tus entregas son de mármol escaso y justo es que los buenos albañiles deban hacer méritos cultivando tus horas.
Pronto nos veremos si Don Eulogio vela por nuestras bromas agridulces.
Atentamente,
Don Toalla de un solo color.
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