Perder Temperatura
Hay parejas que van a dirimir sus distintos puntos de vista a la plaza de la Constitución, no todos compran barquillos, no todos soñaron con máscaras de Mazinger.
Apasionados súbitos del 'Momia Es', pasan de mirar el suelo absortos a gesticular exageradamente, enarbolando estoques opacos, voces apagadas, practicando la afonía, quizás nunca supieron de Mazinger, la elegancia de desaparecer para siempre.
Como en una alegoría poco verosímil, perros duermen alrededor. Estructuras pasajeras comercian con los aburrimientos de los llamados 'consumidores', a veces los bombardeos preceden a las elecciones.
Digo 'Quelentaro' para sorprenderme a mí mismo.
Funciona, ja. El sonido me hace sonreir, el concreto se vuelve chistoso, ja.
Alguien pasa con un paraguas en la mano; innecesario, pero precavido.
Quién lo acusaría? Quién pediría diversión ante todo, en medio de un vendaval?
La estatua de Allende da la espalda a los automovilistas.
La de Alessandri desafía a los jardineros, mientras Frei parece perder temperatura.
Quizás 'Chile' se recrea en todas estas cosas, pero ello se vuelve imperceptible al fijarse en los colores de las ropas.
Yo también busco 'la magia perdida' volviendo a los mismos lugares, diciendo en voz alta:
No todos saben que Alain Bashung vivió.
Silencio social, esperanza personal inquebrantable y viceversa.
lunes, 18 de abril de 2011
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